El Turismo en Tiempos de COVID-19 Carlos Mario Molina Betancur1 El turismo es una de las actividades económicas más importantes de nuestro país, representando uno de los principales sectores que mueve nuestra economía. En efecto, la actualidad, en el sector del turismo, se ha registrado un aumento considerable con la llegada de visitantes extranjeros al país de 150%, en los últimos ocho años, con un registro, en 2019, de más de mil vuelos internacionales por semana. Es decir, el número de turistas en el país pasó de 2,6 millones en 2010 a 6,5 millones, en 2019. Entre 2010 y 2017, el ingreso de divisas por turismo creció 68,2%. Además, la inversión en los hoteles en el país ha sido de 5,7 billones de dólares (2003 y 2017). Además, la Inversión Extranjera Directa en comercio, hoteles y restaurantes, durante el primer trimestre de 2018, fue de 297 millones de dólares, lo que representa para la nación 11.159 millones de dólares por ingreso de inversión extranjera. En los últimos años, el monto de la inversión es de más de 565 mil millones de dólares, que se han distribuido por 166 proyectos: centros de convenciones, puertos, embarcaderos, senderos turísticos y señalización. En el primer trimestre de 2018, la participación del turismo en el PIB fue de 6,9%. Las ciudades capitales de Colombia que más han contribuido a este impulso fueron Bogotá, Cartagena, Medellín, Barranquilla, San Andrés, Pereira, Amenia y Amazonas. Los turistas que más nos visitan provienen de Estados Unidos de América, México, Italia, España y Alemania. A pesar del dinamismo, la pandemia que produjo el COVID-19 amenaza considerablemente este sector, el cual es uno de los sectores de la economía que se ha convertido en la columna vertebral de la economía mundial, en cuanto es el sector que mueve más la contratación de personal calificado como no calificado. En efecto, en tiempo de Coronavirus, medianas y pequeñas industrias lanzan un SOS al gobierno nacional por la profunda crisis de empleo que está produciendo el cierre de agencias de turismo, hoteles, parques nacionales, centros turísticos y aeropuertos del país. A esto se suma el gran volumen de cancelaciones de reserva de vuelos y hoteles para los próximos seis meses, lo que desestabiliza las inversiones y la planeación de todo el presupuesto anual del sector. Pero lo que realmente está en juego es la perdida de millones de empleos que, por su fragilidad y movilidad, difícilmente podrían recuperarse en el corto 1 Procurador Judicial para asuntos administrativos; Miembro de la Academia Colombiana de Jurisprudencia.
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